Un conflicto en tiempo de Avengers Endgame
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El perdón borra, lo que el tiempo no borró
Jaime Tenorio Valenzuela
Cuantos fanáticos de los superhéroes esperaban con entusiasmo y expectativa el 25 de abril del 2019 para el lanzamiento de Avengers Endageme, película que marcaba el final de una saga y también la continuidad individual de sus protagonistas. Donde uno estuviera, se escuchaba a los demás tener sus boletas compradas con anticipación y otros prometiendo que no contarían nada sobre lo visto. Algunos lo lograron cumplir y otros no tanto.
Es así que llegó a mi oficina –Mediación escolar- una situación que se presentó el jueves 26 de abril, y en donde habían niños llorando, otros gritando, otros enojados, y uno, solo uno, indiferente. Al preguntar el motivo de lo sucedido, todos, menos uno respondieron al unísono, Mxxx nos contó que el escudo del Capitán América se rompió. Si bien soy seguidora de Hulk, casi lloro con ellos, así que antes de empezar, hice un pacto de no compartir detalles de la película.
Luego, uno de los niños ya más tranquilo me narró lo sucedido: le pedimos a Mxxx que no lo hiciera, corrimos para alejarnos de él, nos tapamos los oídos pero él corría tras nosotros y nos contó lo del escudo. No quería callarse, se enredó con sus cordones, se cayó y entonces lo golpeamos. Mxxx que estaba algo indiferente, y de manera muy resuelta asumió su responsabilidad y admitió haber contado todo para molestarlos. Luego a solas con él, logró expresar que lo había hecho por venganza, pues en otras ocasiones e incluso en pasados años se había sentido excluido por este grupo de niños. Fue entonces la oportunidad precisa para hacer sentir lo que había sentido en otros momentos.
Posteriormente, en reunión con los padres de familia de cada niño establecimos las medidas formativas incluyendo también a Mxxx. En esta decisión fuimos cautelosos de no revictimizar a Mxxx y consideramos también hacerlo participe en un acto de reparación entre ambas partes. De hecho, sus padres presentaron esta iniciativa al colegio, pues sabían que él había premeditado lo sucedido.
En este sentido, trabajé con el grupo de los niños y con Mxxx por separado; y ahora viene lo emocionante y transformador de la situación. En este punto, el énfasis no era precisamente resolver el conflicto, sino el comprender los motivos, pues de esta manera se podría crear estrategias para no presentarse una situación similar entre ellos. Comprendimos que aún persistían conflictos de años pasados que no fueron resueltos acertadamente y que la imprudencia de Mxxx al igual que Thanos con el chasquido del guantelete generó un gran disturbio y un caos a su alrededor. Después del diálogo y reflexión con ellos, era importante en construir un proceso restaurativo. Entonces surge la iniciativa de hacer este proceso con Avengers y con uno de sus símbolos más representativos, el Guantelete y sus gemas del infinito.
En este proceso, cada niños dibujo su mano en representación del Guantelete, de ahí comprenderían que son los actores principales de esta situación y que esta jornada formativa no solo correspondía a sancionar la reacción que tuvieron por la falta de un compañero, era trascender más allá de lo retributivo, y pasar al otro lado de la reconciliación de los vínculos afectivos.
Es así que al ilustrar cada Gema, analizarían a su vez la situación teniendo en cuenta las Preguntas Restaurativas sugeridas en situaciones de conflicto.
Tiempo ¿cuándo se presentó el conflicto? ¿Corresponde a este momento o de situaciones pasadas?
Mente:¿Cómo influye nuestras elecciones cuando estamos en grupo? ¿Perdemos nuestro criterio personal?
Alma: ¿Qué impacto tuvo esta situación en las emociones? ¿Cómo se sintieron? ¿Cómo se sintió Mxxx al sentirse excluido en diferentes momentos? ¿Qué ha sido lo más difícil para ti?
Espacio: ¿Cómo crees que pudo resolverse esta situación? ¿Qué acciones pudiste haber tomado?
Realidad: ¿Quiénes resultaron afectados? ¿Cómo crees que puede mejorar esta situación?
Las respuestas fueron tan especiales como las reflexiones de los niños, y desde la gema de la realidad, coincidieron en poner una nueva, -la de La esperanza-, explicando así que con ésta siempre habrá perdón.
Al final guardaron esta gema en cofre, y llevaron un proceso de reconciliación y reparación entre todos. Así como lo expresa la frase El perdón borra, lo que el tiempo no borró, esta sencilla palabra que estuvo ausente en otros momentos, ahora estaba presente para restaurar las heridas del pasado y empezar a construir en colectivo la empatía, la solidaridad y a ponerse siempre en el lugar del otro.
Resumen experiencia restaurativa
Gloria Patricia Hurtado R.
Psicóloga y Mediadora Escolar
@Psi_Serenamente